LOS TATUAJES MISTERIOSOS
Una legión de diablillos se le encaramó a la cabeza la madrugada que descubrió un tatuaje grabado en el omóplato de su esposa. Conocía el mapa de su piel y era un signo nuevo. Se arrastró al trabajó entre cavilaciones. "Está en una secta, hay otro hombre, tiene doble vida". Cualquier pensamiento cabía en su mente mientras fuera funesto. Él, que se creía flemático, temía preguntarle por temor a no soportar la respuesta. Pasó amargado y desvalido el resto del día.
Al siguiente amanecer la isla del hombro de su esposa asomó entre el mar revuelto de las sábanas. Una isla marcada por un retador garabato de trazos. Aprovechó que dormía para fotografiarlo con el móvil. No trabajaría, dedicaría la mañana a buscar su significado.
Aguardó entre cafés a que abrieran el local de tatuajes. Un chico rudo que de inmediato le recordó al toro de los Chicago Bulls pero con arete nasal le espetó que no trabajaba en la Escuela Oficial de Idiomas para descifrar un kanji japonés. Nunca tuvo una negativa tan fructífera. El Departamento de Japonés de la Escuela Oficial de Idiomas lo atendía una menuda oriental. Al ver la imagen del tatuaje sus rasgados ojos se abrieron como nunca pensó que podrían hacerlo personas de su raza y su flequillo bailaba al compás de una risa en la que sus dientes eran ocultados por su delicada mano.
- ¡Qué dice! - Gritó incontenible para apagarle la carcajada.
- Su esposa gran sentido del humor, - decía la sonriente la chica- mensaje dice "¡estoy embarazada, bobo!".
Él, que se veía imperturbable, recorrió las calles sin rumbo, feliz, hablando bajito e imaginando que a cada paso aplastaba un diablillo lleno de malos pensamientos.
Hubo rosas aquella noche y cena en el mejor restaurante de la ciudad. Lo que no sabía su esposa era que un nuevo tatuaje ilustraba ahora su antebrazo. Escocía pero se divertía imaginando todo lo que le costaría averiguarlo.
- Un brindis por nuestro amor y por la criatura que viene, exclamo mirándola a los ojos y alzando la copa.
-¡Ah - pensó para sí - qué bien sabe el vino tras tatuarse un piropo en mongol!
jajaja!
ResponderEliminarmuy bueno, Goath!
A mí el vino me sabe bien como sea!
No tengo tatuajes!
un abrazo!
interesante tatuajes, yo tambien quisiera hacerme algun nombre en algun dialecto extraño o bien algo que signifique mucho en mi vida, abrazos para vos, bye
ResponderEliminar¡Vaya manera de dar una noticia!
ResponderEliminarA mi me la dieron de la siguiente manera: Una noche cuando llegué del trabajo mi esposa me tenía un regalo. Al abrirlo eran varias calcetitas de bebé. ¡No lo podía creer! y ahora tenemos una preciosa hija.
Me ha encantado la historia y sobre todo me ha traido hermosos recuerdos. Excelente como siempre, y perdon por la ausencia pero ya estoy de vuelta...
Saludos.
Ummm muy interesante, lastima que en nuestra sociedad tan cerrada ponerse un tatuaje signifique algo así como "llevar una doble vida".
ResponderEliminarSaludos!
Bonita historia, amigo Goathemala. Me ha gustado mucho esa color a comedia que le has dado, con esa preocupación y desvalimiento del marido; y esa paso por delante de su mujer, que sabiendo lo que aquél iba a hacer, ha querido darle la noticia haciendole una pequeña broma. Es un texto ágil y directo.
ResponderEliminarSalud
Espléndida broma contada con un fino talento, imprescindible para lo tragicómico.
ResponderEliminarGracias por hacer que la risa me haya inundado.
Saludos.
Me divirtió el relato. Pensé en un tatuaje en letras góticas en mi nuca. Poesía, diría. Me acordé cuando mi hijo entró a casa con un tatuaje en el antebrazo y le dije: porqué te haces daño, y el riendo respondió que era una calcomanía. Él no usa anillos ni cadenas, menos un reloj. Era poco factible un tatuaje. Hoy deseé un tatuaje en esta piel tan mía.
ResponderEliminarHe descubierto este blog y me parecen muy buenas historias. Tengo un concurso de cuentos, al que te invito a participar. Para que puedas verlo, necesariamente tengo que hacerme promoción dejando mi link. Si el tema no es de tu interés, pues solo lo borras y ya.
ResponderEliminarhttp://cuentospajeros.blogspot.com/2008/04/i-juegos-florales-pajeros-guatemala.html
¡Vaya!... pues la embarazada si que conocia perfectamente al elemento porque imaginarse que iba a averiguar el significado del tatuaje, ya es ir lejos.
ResponderEliminarMuy buen post, como siempre.
Saludos!!!
Me ha divertido el post... la risa es siempre buena.... hay que reconocer que es una forma original de dar esa noticia...
ResponderEliminarUn saludo
Al igual que a Eds, a mi también me trajo lindos recuerdos.
ResponderEliminarAhh las mujeres tenemos tanta imaginación para dar esa clase de noticias!
Saludos.
Bella forma de expresar que muchas veces las cosas no son como parecen..
ResponderEliminarUn abrazo
:-) Muy buena forma de dar una noticia así, bien dicen que muchas mujeres conocen a sus maridos mejor que lo que ellos mismos se conocen.
ResponderEliminarSaludos Goathe!
Ja, ja, es cierto: mucha gente se tatúa kanjis sin saber su significado y se ve cada cosa por ahí que...
ResponderEliminarGracias, siempre es bueno que nos hagan reir, aunque creo que la mujer tenia un poco de mala uva, con lo facil que seria decirle, ¡oye chico! que la rana dijo Si.
ResponderEliminarBesitos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarGrandes noticias estas, me encanta la forma original de este post para contar algo que es tan bonito cuando pasa a las parejas. Muchos besitos (por cierto, que dice el piropo?)
ResponderEliminarjaaaaaaaa
ResponderEliminarqué bueno te quedó, Goathe!!!
bueno, es que a mi me emocionan siempre tus escritos, ya lo sabes, y no me cansaré de decítelo!!!
Un besote enooorme
Que bueno sentirse tan segura... saber que pese al desconcierto inicial, haría lo imposible por saber que le estaba "contando"...
ResponderEliminarQué bien debió saberle el vino a ella, al comprobar en que poco tiempo lo había logrado...
¿Serà acaso veracruzana la chica? porque tiene un gran sentido del humor. Pobrecito èl, jijiji.
ResponderEliminarBien por tu relato.
Abrazos....
Creo que mi mejor piropo para ti es decirte que eres un redomado cuenta cuentos. Un cuenta cuentos... con arte
ResponderEliminarSaludos lindos
¡Vaya forma de comunicarse!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho, Goathe, se perfila mucho humor diestro. Muy bueno, nene.
Agradable historia Goatheman, el engendrar vida siempre es una buena noticia.
ResponderEliminarAbrazos
las malas interpretaciones de las cosas, dan lugar a los mayores entuertos y confusiones...saludos
ResponderEliminarMe ha encantado, Goathe, vuelvo a leerlo.
ResponderEliminarUna relación misteriosa, críptica y atractiva!!
Un abrazo.
Desde luego, la esposa conocía muy bien la tendencia del esposo a pensar mal... Delicioso relato, querido amigo. Eres una fuente inagotable de imaginación. Besos.
ResponderEliminarJEJEJE!
ResponderEliminarme has sacado una sonrisa que me anima el alma, este relato se las trae y te doy las gracias por este lindo rato, ahora que la primavera no es mi aliada.
un abrazo
Como si en castellano no hubiese palabras y piropos:):):) Es que los hay raros.
ResponderEliminarEso del no preguntar por temer la respuesta es muy típico de algunos...
Dos abrazos más
Las buenas noticias son siempre bienvenidas, de la manera que sea pues al final se convertiran en vino y rosas.
ResponderEliminarSimpático relato.
Un abrazo.
jeje, Es curioso, cuánta gente andará por ahí con cosas tatuadas sin saber qué significan...
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