EL CAMINO DE PABLO CARRASCO

Gatito

A Charles de Batz, contador de historias, caminante ilustrado, escrutador de nubes y amigo.

Lo cierto es que Pablo Carrasco ya llevaba la semilla del cambio la mañana que acudió al trabajo. Detestaba su temperamento sanguíneo, le hastiaba lo que era y por encima de todo odiaba la carpintería a la acudía cada día para ser nadie. A casi todo había llegado a acostumbrarse en su trabajo. No a lo de hoy. En un rincón, entre serrín, le mostraron un minúsculo gatito negro que dormía enroscado.

- ¿Pero, qué hace aquí? - preguntó sorprendido-

- Se coló una gata el fin de semana pero le arrojamos piedras. Esa, ya no vuelve. Venga, mata a la cría o dale un curso de buceo – le ordenó el encargado señalando la pileta en la que humedecían la madera-.

Esa misma noche el encargado le contaba con estupor a su esposa la reacción de Pablo, aseguraba que torció el gesto y que, con ojos retadores, fumaría un pitillo y entre lentas caladas acercó el gatito tanto a su cara que temió que lo descabezara de un mordisco. Después, lanzaría la colilla lejos diciendo “el último” y añadiendo – eso lo oyeron todos - “al carajo”.

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Voy descubriendo placeres nuevos. Lavarme los pies cansados con agua fresca o partir antes del amanecer, siguiendo la Vía Láctea que cubre mi ruta como si fuera la misma. Entonces, en la oscuridad total, percibiendo en el refugio de mi cuello su tacto tibio, lo tomo. Habitan en sus ojos destellos de los astros y sé que en unas horas, con el alborozo de las aves matinales, esa mirada será cazadora. Ya tiene gracia que con lo que me aburren los dogmas me animara a emprender El Camino de Santiago con un gato en los hombros.

He constatado que, hasta ahora, mi vida la ha movilizado más los miedos que las motivaciones. Y esos temores, sentir dolor, perder el trabajo, quedarme solo, son estrictamente materiales e infundados. Provienen del terreno que nadie ha pisado, el futuro. Pero sí son aptos para generar angustia y modificar mi carácter.

Desde que comencé medito y vivo mi presente y eso no va mucho más allá de la hogaza que mastico o de la sonrisa que me provoca ahora mismo mi gato jugando con una espiga.

La única ilusión que permito al futuro es la propia del caminar, proseguir la ruta de las estrellas, la que lleva a Compostela, la que concluye en mi interior

Pablo Carrasco, Nájera, otoño de 2008.

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Foto de mi hombro junto con el gatito que inspiró la historia.

Comentarios

  1. �sta inspiraci�n que siga brotando para nuestro deleite.

    Que ojos m�s hermosos tiene el gatito.

    Un abrazo y que pases un buen d�a

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  2. ¿Por qué hay tanta gente que odia a los animales?, ¿por qué apedrear a la gata y querer ahogar al gatín?. Hay demasiada gente cruel por el mundo y eso me entrsitece.
    Buen fin de semana.

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  3. Gothemala.
    Me ha gustado muchísimo la belleza de tu texto y el golpe de rebeldía sencillo y contundente, sin que los otros lo perciban. Habrá un antes y un después del "al carajo"
    El siguiente escrito es la manifestación del aquí y del ahora del zen y todo lo que comporta de cambio vivencial.
    He buscado información sobre Pablo Carrasco y no supe encontrarla.
    Inuits

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  4. No me extraña, es precioso. Besos.

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  5. Esa pequeña pantera negra es capaz de inspirar un libro, habra que ver cuando esos ojos se vuelvan verdes o amarillos. (Lizzie sigue manteniendo algo de azul alrededor de sus pupilas y el resto es verde esmeralda, esperemos que resulten asi los del minino). viajar con un gato es toda una aventura, su compañia un regalo. y yo he mandado al carajo hasta un prefecto por no auxiliar a uno, y cuando me vinieron con la cantinela de la patria, le mostre un lindo pasaporte made in england... solo que era el de mi madre.

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  6. A mi en realidad, me encantan los: "al carajo" no podria vivir sin ellos...

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  7. Luego respondo a sus comentarios. Gracias por anticipado.

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  8. Me encantan los animalitos, y cualquier abuso en su contra me llena de colera.

    Aunque los gatitos no son mis preferidos, me inclino mas por los perros, este negrito de ojos azul mar es una belleza.

    Lindos textos amigo y sigo comentando con una sola mano.

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  9. Meme , estoy bastante seco y muy desganado pero las vacaciones, ya inminentes, me vendrán como un bálsamo. Gracias y saludos.

    Abedugu , porque esconden el lado animal que tenemos, porque son débiles y a la vez despiadados. Tengo una cosa clara quien maltrata una animal no está preparado para la relación con los humanos. Ese gatito está en mi trabajo y se encuentra en perfecto estado. Gracias y saludos.

    Inuit , me inventé a Pablo Carrasco, anteriormente le llamé Alcibiades Baldón. Lo escribí muy deprisa, demasiado. Una de las cosas que he aprendido en el tiempo que llevo escribiendo es que escribir es, ante todo, corregir. Gracias y saludos.

    Waiting for Godot , sí y su madre lo mueve mucho de lugar. Nos tiene un poco locos. Saludos y gracias.

    Lady Zurikat, lo del peregrino con un gato en el hombro es real. Lo encontré en Roncesvalles, la frontera española. Ya había cruzado media Francia y le quedaban 700 Kms de nada. Era la sensación del camino. Me marcó mucho el cariño con el que lo trataba. Era una zagal pelirrojo y tímido. Gracias y saludos.

    Palmoba. ¡Qué sería de la vida sin esa soterrada posibilidad de mandarlo todo al carajo! Saludos y gracias.

    CHC, a mi me gustan ambos. Ayer mismo, estuve con mi esposa chapina en la arena de una Plaza de Toros, escuchando música brasileña. ¡Ojalá queden para eso las Plazas! Me conmovía pensar todo el sufrimiento animal que tenía que haber ocurrido allí. Espero que te recuperes muy pronto. Gracias y saludos.

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  10. Algo de todo eso hay en el Camino, querido amigo, y del deseo de perderse en esa inmensidad de tiempo, experiencias, vivires y encuentros. Es algo que llegas a conocer cuando eres incapaz de explicarlo...

    Gracias por la dedicatoria

    Salud

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  11. Anónimo21:56

    Los gatitos no son animales de mi devoción, al menos, admito que en fotos o algo que no sea físico, se ven bonitos.

    Imagino cual grotesco iba a ser el "curso de buceo" para con la cría, jajajaja. Ha pasado por mi siniestra mente a veces.


    Saludos!

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  12. La foto està padrìsima, me gustò el color de sus ojos con el color de la camiseta y el contraste de las vigas, aparte la postura del gatito. Buena foto.

    Y tan cierto que por una foto o un hijo nuestro -los de cuatro patas- nos inspiran a escribir.

    Ya se me antojò ir a ese viaje de Compostela.

    Beso.

    G

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  13. Anónimo08:19

    Porque todos necesitamos un empujoncito para ser valientes, buenos, algunos necesitan un seismo y otros una vida y no llegan a serlo. Pero en esta historia, a mi entender, Pablo, sólo necesitó la mirada temerosa de un gatito, para mandarlo todo a la porra y hacer lo que siempre soñó que lo haría feliz.
    ¡Bien por Pablo!

    Dos abrazos con besos incluidos

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