Cuento de navidad para tristes solitarios
Con su ojo vivaz, su pelo cano y su espíritu indomable, la Sra. Olsen, se vuelve aún más excéntrica en estas fechas. Lleva todo diciembre esparciendo mensajes navideños anónimos. Acaba de regresar de una residencia de ancianos donde colocó una postal en cada taquilla. La noche anterior empapeló las farolas con mensajes de paz. Algunos de ellos son cristianos - ella es creyente - otros sólo optimistas o vitales. Mientras soba a su gato anuncian por la radio vientos racheados para el día de Nochebuena. Podía aprovecharse ese mal tiempo, opina. Entonces, le viene la chispa. Se levanta y se dispone a pasar otra noche sin dormir, escribiendo mensajes diferentes e interrogándose si venderán globos en la tienda de los chinos.
Cuando el Sr. Gris llega a casa comprueba que en su minúsculo jardín, en el seto de aligustre, hay un globo medio desinflado. Lo desenreda gruñendo. Al entrar a casa lo abandona en el sillón. Prende la lumbre y se sienta enfrente de la chimenea, bien cerca de la incipiente llama. Esa noche será Nochebuena y piensa soportarla bebiendo en soledad. La visión del globo rojo en la butaca, que tanto tiempo ocupó su esposa, le trae la metáfora exacta de su propia alma: agotada, rendida y laxa como un globo abandonado. Se sirve una copa "somos absurdos, ni tú eres ya globo ni yo soy persona, brindo por nuestra asumida derrota".
Le despertó del sopor un petardo. Gritó a los gamberros de la calle. Pensaba servirse el segundo trago cuando quedó sorprendido por el estado del globo. Estaba hinchado, como si en su cabezada le hubieran insuflado aire. Al tomarlo extrañado comprendió que fue el calor del fuego el que lo había dilatado. Fue, entonces, cuando algo de su interior le llamó la atención. Lo desinfló con cuidado para no pincharlo y extrajo un papel de seda plegado con delicadeza. Al desenrollarlo leyó:
"Ves una estrella, la sigues, y te encuentras con un niño que te dice que todo es de otra manera.* La vida, el mundo, pueden cambiar. Feliz Navidad."
El Sr. Gris se impresionó. El recuerdo condujo humedad a sus ojos, a la luz de las brasas sus lágrimas se hicieron luceros extenuados. Así hablaba su esposa. Ella nunca perdió su fe, ni siquiera al final cuando la enfermedad de las seis letras se la llevó. Siempre fue un surtidor de vida, poseía el preciado don de contagiar la alegría a su paso, tras su pérdida él se abandonó.
Para el Sr. Gris la vida es un sortilegio de casualidades. Nada más. No hay espacio para el destino o la predestinación. Es muy posible que ya nada le haga cambiar esa opinión tan materialista. Sin embargo, está convencido de que el mensaje del globo es una explícita señal de aliento de su amada. "No sé la manera pero esta Nochebuena has regresado a mí". Aún más, entendió, que su alma como el globo necesitaba calor, calor humano para recuperarse. Esa noche tuvo un sueño plácido: un baile con su esposa entre cúmulos blancos al cadencioso son de su melodía favorita.
Por primera vez en muchos años la claridad del amanecer sorprendió, al Sr. Gris, con una sonrisa ajustada al rostro.
A esa misma hora a varios kilómetros de distancia, el agotamiento rinde a la Sra. Olsen. Amodorrada y un poco desanimada, se pregunta. ¿Servirá para algo todo mi esfuerzo, provocaré alguna ilusión o todo serán ideas estériles de una vieja chiflada?
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* Esta frase tan repleta de significado pertenece a mi estimado amigo Gonzalo Gutiérrez.
Foto: Blanca Fernández.
Con que una sola llama prenda... merecerá la pena...
ResponderEliminarUn beso Goathemala, y Feliz Navidad :)
Muy bonito Goat, precisamente de los solitarios es que tenemos que estar pendientes.
ResponderEliminarFeliz navidad y que el universo te regale mucha salud.
Gracias, amigo: creo que soy yo el que estaba dentro de ese globo rojo... Un gran abrazo de feliz Navidad.
ResponderEliminar¡Wowww!
ResponderEliminarLa pregunta de la señora Olsen al final,es de lo mejor.
Gracias Goathe.
Qué hermosura de cuento.
A la pregunta de la Sra. Olsen, si, claro que sirve de algo el esfuerzo que se haga para llevar un poco de ilusión y esperanza a las personas que lo han perdido todo. Y de eso precisamente es de lo que trata la Navidad, de regalar lo mejor de uno mismo con amor y con la mejor voluntad.
ResponderEliminarTe deseo una una Feliz Navidad y que el Niño Dios os traiga toda clase de bendiciones y parabienes. Que recibáis el año nuevo con alegría y esperanza y que sigamos en contacto siempre compartiendo ilusiones, sueños y realidades.
Un beso y un cálido abrazo.
Gracias por la ilusión y la visita.
ResponderEliminarFeliz Navidad y feliz año nuevo¡¡¡
Es un cuento precioso, Goathemala, en el que pueden suceder y suceden cosas maravillosas. Creo que tiene vida, así que no te extrañe que sigan pasando cosas.
ResponderEliminarAprovecho para desearte a tí y a los tuyos una Feliz Navidad y que la estrella de Oriente os guíe siempre hacia la felicidad.
Un beso.
Bellísimo!
ResponderEliminarEsperanza, ante todo.
Paso a de4searte un tiempo lleno de Paz.
Un abrazo!
Me gustó mucho el cuento. Obséquialo impreso a tus cercanos. Yo haré lo mismo. Vale la pena.
ResponderEliminarGracias por este año que me diste tanto.
Esperando seguir en el 2009.
Siempre-siempre-siempre lo mejor.
Recibe mi aprecio y cariño.
Digno de HC Andersen.
ResponderEliminarFeliz navidad, amigo Pedro.
Yo creo que sirve, cierto, nunca hay que esperar que retorne el cien por cien,pero sólo no haciendo nada se consigue nada.
ResponderEliminarEstos días son de tristeza y soledad para mucha gente.
Te dejo un versito sobre la soledad que espero, deseo, que nunca sea tu caso.
Siempre llega despacio y contundente y acaba su trabajo y languidece,
no presta explicación, desaparece y su nueva intervención es inminente.
Para ti, de mi, paz y felicidad.
Querido Goathe,
ResponderEliminarMe has hecho sonreír por varias razones: por el paralelismo que encuentro entre tu relato y mis mañanas y por cómo lo cuentas! Hace meses, que encuentro por mi camino hacía el trabajo poesías, retales de ternura, de sueños, de absurdo, decorando el gris de la ciudad amurallada. Me gustaron tanto que ahora formo parte de todo ello, y mira por dónde, el ayuntamiento puso una multa a dos de los compañeros repartidores de poemas!
Lo del globo me recuerda otra historia, también enternecedora.
Gracias por brindarnos con este cuento tan bonito y lo puedo asegurar, increíblemente real.
Eres una buena persona, y lo máximo que te puedo desear es que lo sigas siendo! Por fiestas y siempre!
Un beso
Hace poco termino la temporada de cometas (papalotes) por estas tierras y con los niños de la casa escribiamos mensajes en ellos para que fueran escuchados por DIOS....
ResponderEliminarLuego en casa los leimos... la anecdota es que cuando leiamos el de Sara (una chiquita de 8 años), ella habia escrito algo con una letra muy pero muy pequeñita, y le preguntamos porqué tan pequeña la letra y nos contesto, que para que su mensaje fuera un susurro...
Un abrazo Pedrito... PAso en estos días...
Buenisima tu sugerencia, me encantó kayah...
Bonito cuento de Navidad, Goathe.
ResponderEliminarSí que sirvió el esfuerzo de la Sra. Olsen, aunque solo hubiera sido para hacer sonreir de nuevo al Sr. Gris (quizá a partir de ahora, podría cambiarse el nombre). La clave es la ilusión, mantener la ilusión, la fe, la esperanza, a pesar de las adversidades de la vida.
Enviemos esta Navidad un mensaje como este en un globo rojo a alguien de nuestro entorno.
Un abrazo.
No vale de mucho lamentarse eternamente, alo par hundirnoscada vez más ... saludos y felices fiestas...
ResponderEliminarTodo sirve y todo llega,los globos,los mensajes,la ilusión...
ResponderEliminarFeliz Navidad amigo...
Un fuerte abrazo
La verdad es que no perder la esperanza es vital, pero siempre se necesita ayuda, siempre necesitamos de los otros, en soledad nos desnortamos ...y hay tanta soledad....
ResponderEliminarGoat... sólo desearte de corazón que seas feliz, todo lo mas que puedas en estos dias, todo lo que tu vida te deje ser... sin mas pretensiones... un abrazo y un beso navideño....
Que hermosa historia, sobre todo el final. Enhorabuena como siempre por saber tocar la fibra. Felices fiestas!
ResponderEliminarJorge
Ojalá la Sra. Olsen hubiera pasado por mi casa.
ResponderEliminarPerdón por la tardanza, pero he vivido sin tiempo estos días.
Precioso cuento, Guathe. Me ha encantado.
ResponderEliminarMe encanta tu blog porque se respira paz; y de esto último he venido a traerte más: te deseo mucha paz y alegría.
Un abrazo muy grande desde la nave de los sueños.
Mar
Un hermoso cuento de navidad. Muchas gracias y te deseo lo mejor en estas fiestas, recibe un sincero abrazo y mis deseos de un año nuevo lleno de bendiciones en todo sentido.
ResponderEliminarSaludos.
Parece que la fuente de tu entrada coincide también con el de la última mía. Ojala tu corazón esté bien abrigado durante estos días.
ResponderEliminarAbrazoz.
Entrañable y tierna historia. Un momento de ilusión viene bien a todos.
ResponderEliminarFelices fiestas
Vuelves a emocionarme con tu relato. Impecable desde todo punto que se mire.
ResponderEliminarMe hiciste imaginar a mi madre en el sillón. A ella se la llevó esa de nombre alemán.
Gracias por abocarnos a la única salida: LA ILUSIÓN. Dar y recibirla.
Feliz Navidad y lo mejor para el año que viene
Con tu honorable permiso, le enviaré este hermoso cuento a doña Pirata por correo electrónico, ya que no se le da mucho lo de los blogs y no quiero que se lo pierda.
ResponderEliminar¡Felices fiestas!, un brindis por las buenas letras.
Siempre me he sentido como la Sra.Olsen, repartiendo felicidad mediante notas escritas. Anoche mismo repartí tarjetas en todos los buzones de mis nuevos vecinos.
ResponderEliminarY siempre me hago la pregunta que se hace la protagonista:
"servirá de algo, provocaré alguna ilusión..."
Me encantó el cuento y todo tu blog.
Un abrazo sincero
Lluis
Perdona pero tengo que hacer otro inciso.
ResponderEliminar-Me siento como aquel niño que había sido operado de la garganta y no podía hablar, era Navidad y quería desear a todos felicidad... Así que cogió un trozo de cartón y apuntó en mayúsculas: FELIZ NAVIDAD, y salió a la calle corriendo enseñando a todos el cartel.
Pues lo dicho: Feliz Navidad.
Lluis.
Feliz Navidad desde mis vacaciones en medio de una ciudad campestre! Aca hay arboles y vida de todas formas que te encantarian. Se incluyen en elmensaje mis nuevos amigos: una ternera, una familia de gansos, una nutria y un casal de teros.
ResponderEliminardavid santos dijo...
ResponderEliminarPor los que daremos gracias por pasar otra noche buena…
Por los que recordaremos las ya pasadas…
Por los que pasaran la primera…
Por los que no la podrán pasar…
Por todos ellos y muchos más…
Os deseo Feliz Noche Buena y Navidad…
Publicado por WUAPIBEGO
Bello relato Goathe, bello deja un hermoso mensaje.
ResponderEliminarFelices fiestas y un gran abrazo
Feliz Navidad querido Goathemala,
ResponderEliminarpara ti y los tuyos. Que podamos seguir disfrutando de tus relatos y tu saber estar y hacer, un espacio de manos amigas siempre, y Feliz Año Nuevo.
Inuits
Felices fiestas, mis mejores deseos para tu hogar y familia. Un abrazo navideño
ResponderEliminarHermosa historia, Goathe, y bueno, es que tú eres un ganiazo (acaparador de musasss! jaja)
ResponderEliminarTe mando un abrazo enooorme y te deseo una felicísima Navidad junto a los tuyos ♥
Querido amigo.
ResponderEliminarAcabo de recibir un regalo muy hermoso, tu felicitación y tu blog.
He paseaado entre sus lineas escritas con delicadeza y ternura y me has hecho feliz.
Te deseo la alegria del Nacimiento y la esperanza de la primavera
Puedes estar seguro de que te seguiré.
Feliz navidad.
Llego casi a última hora para desearte feliz Navidad.
ResponderEliminarUn abrazo
Un beso enorme, más aún si cabe... ¡¡Feliz Navidad!!
ResponderEliminarFelices Fiestas, Goathe para tí y los tuyos.
ResponderEliminarUn abrazo
Somos poquita cosa, pero somos. Feliz Navidad. besos
ResponderEliminarUna historia hermosa. Muy hermosa. Un beso grande para ti, con tu alma hermosa. Besos. Feliz Navidad.
ResponderEliminarQue bonito el cambio goat.
ResponderEliminarUyyyyyy no me hagas esto que soy copio-na y me darán ganas de cambiar el mio.
Besos.
Muy tierno. La navidad ,para los no religiosos, también puede ser la excusa para reavivar sentimientos dormidos.
ResponderEliminarFelicidades!
La mayoria de las ocasiones un pequeño detalle es un gran tesoro, a las pruebas me remito.
ResponderEliminarUn saludo amigo y feliz 2009!
Mi intención no era otra que contestarles individualmente pero estoy abotargado por una de esas gripes raras de esta temporada. Parece una gripe gallega, no sé si la tengo o no la tengo.
ResponderEliminarMejor, opino, aprovechar el tiempo para visitarles.
Gracias.