EL BOTÍN DEL PIRATA

“Cada acto tiene su explicación, todo lo que hacemos guarda un sentido.”

Aunque no le gustaba la serie comprendió esa frase del detective bigotudo. Todo tenía un significado. Miró a su hermana que estaba absorta frente al televisor, mordisqueandose el pelo sin perder detalle. Pensó que no tendría ganas de jugar con él.

Decidió jugar a los piratas. El lóbrego piso sería la Isla Oscura, la que tiene los acantilados imantados para desviar el rumbo de las naves corsarias y, así, impedir que encuentren su codiciado tesoro. Sería un pirata náufrago, último superviviente de una fragata cañoneada por los franceses.

Buscaba el tesoro entre una maleza de sillas pero en la isla traicionera no encontraba nada más que desolación, soledad y hambre. Con sus fuerzas menguadas el joven pirata trepó al armario porque sólo le quedaba revisar las oquedades de ese acantilado que enloquecía a las brújulas. En la parte superior encontró los caramelos prohibidos, la pistola de papá y una caja metálica de galletas.

- ¿Por qué esconden aquí todo esto?, se preguntó.

Recordó la frase del detective con mostacho y se dispuso a hallar una explicación.

Con los caramelos, sin duda, querían protegerlo para que no se empachara. Los dejó donde estaba y sólo guardó en su bolsillo diez como mínimo derecho de pillaje. Atrapó la pistola y la sopesó entre sus manos. Noto que se ponía tan nervioso con ella que el corazón le subía a la garganta. Decidió dejarla. Pensó que su padre, aún siendo muy valiente, tenía miedo y que por eso ocultaba el arma. Le funcionaba la lógica del detective.

Al abrir la caja metálica encontró gran cantidad de viejas fotografías. Desconocía las personas que le sonreían desde lejanas épocas, atrapadas en un desvaído blanco y negro. Se estremeció al verse él entre ellas. “Soy yo pero a la vez no lo soy, estoy raro y no conozco a nadie”. Siguió pasando fotografías hasta que descubrió una en la que aparecía junto al abuelo cuando éste tenía sombrero y era más alto. Reconoció a su progenitor. “Es papá con el abuelo. ¡Pues era idéntico a mí, que copión!”

–¿Por qué oculta papá estas fotos, qué explicación daría el detective de la tele?, se preguntó mientras bajaba del armario.

En la plácida quietud de aquella calurosa tarde, el joven pirata comprendió que había mayores que decidieron esconder al niño que una vez fueron, creyendo que sería mejor afrontar la vida adulta con la infancia atrapada en cajas metálicas ocultas en cavidades de un acantilado maldito que confundía a los navegantes.

Comentarios

  1. las cajas metálicas de galletas son una forma dulce de melancolía y de resguardar del polvo,vidas ajenas e infancias extrañas...muy bien traido,compañero...paso de nuevo a reelerlo..
    por cierto que me alegro de ser el primero
    un fuerte abrazo

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  2. Gracias Max. Esos eran juegos y exploraciones.
    Hoy los niños ven tanta tele que se les embota la mente y acaban con la fantasía "tele-dirigida".

    Para los padres es sin dudarlo mejor tenerlos sentaditos, controlados y absortos. Pero

    ¿Es bueno para su educación?

    Abrazos.

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  3. No no es bueno para su educación yo viví una infancia llena de cosas buenas y fuera de casa siempre por las tardes, jugando con otros e inventando un mundo cada día con la pandilla. Y al final eso te enriquece. Un abrazo.

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  4. Eso dice de todos nosotros, y de ese pequeño tesoro que ocultamos con el mayor de los secretos y la más profunda delicadeza en el rincón más recóndito de nuestro ser.

    Es una caja de metal, recordando a aquellas de galletas de nuestra infancia, a la que muchas veces miramos, cuando nos atormenta el presente, como si fuera la misma de Pandora, dispuesta a lanzar sobre nosotros los más terribles sufrimientos. Aquellos que produce la nostalgia.

    Salud

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  5. "afrontar la vida adulta con la infancia atrapada en cajas metálicas ocultas..."


    Es mucho..... y muy bien explicado.
    Qué capacidad de síntesís, y qué tristeza....

    Ojalá no nos encerremos en cajas metálicas: los niños SIEMPRE las descubren y nos confrontan.

    Un beso de galletas y sin pistola.. y sin caja... y con un álbum de tapas de colores...

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  6. Que texto tierno e inteligente! El mensaje es tan importante: la imaginacion en la infancia es base del crecimiento adulto y el asumir nuestro pasado es la unica manera de saber quienes somos y sincerar nuestra adultez. Me encanto lo del papa copion, y la advertencia a un arma en la casa, que por mas escondida que este es siempre un peligro. Un abrazo orgulloso.

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  7. Pues no me parece que al estar escrito de un tiron tenga partes poco definidas, al contrario a mas de uno nos evoco esa infancia que dejamos guardadas en latitas.

    Y sabes tengo un poema en ese mismo contexto que aun no ha salido a la calle.
    Te lo pasare para que veas que increible es que cuando somos adultos ignoramos pero a la vez estamos conscientes.

    Abrazos

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  8. “guardó en su bolsillo diez como mínimo derecho de pillaje...” jajaja solo diez?

    “Decidió dejarla. Pensó que su padre, aún siendo muy valiente, tenía miedo y que por eso ocultaba el arma.” Esta reflexión es fenomenal...!

    Goathemala, tus relatos son increíblemente hermosos desde cualquier punto que se les mire, eso y combinado con los comentarios de tus lectores... mis respetos para todos ellos, tengo que confesar que me enriquecen casi tanto como tus escritos. Recuerdo no hace mucho Max nos contaba como su hermana había hecho un libro de una etapa de su blog -con comentarios y todo-, ojalá que un día de estos publiques todos tus escritos y que ya publicados pueda llegar a muchos niños y adultos, seria una formidable contribución. Me ha maravillado tu relato de hoy.

    Gracias y abrazos

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  9. Anónimo05:49

    Los recuerdos son tesoros....hay q cuidarlos....saludos, amigo arbol

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  10. Gracias por los comentarios, luego les respondo.

    Sin ser autobiográfico, me identifico con ese niño. Quizás por eso lo escribí de un tirón y tengas partes poco definidas.

    Saludos.

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  11. De pequeños queremos ser grandes y de grandes en algún momento sacaremos al niño escondido.

    Siempre un gusto leerte.

    En estos momentos más que nunca.

    Saludos venezolanos.

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  12. me encantan las fotos , aunque estén mal sacadas o muy brillantes me cuesta deshacerme de ellas...
    Y estoy de acuerdo contigo , la televisión tiene embobados a la mitad de los niños ,los clientes del restaurante siempre se averguenzan de que sus hijos jueguen en el comedor y recurren a pedir disculpas porque andan molestando ...yo siempre digo lo mismo :" los niños nunca molestan...en cambio algunos adultos..."

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  13. Guardé muchos de mis sueños en cajas de galletas. Algunos los he sacado y publicado, muchos todavía no han visto la luz. Es mi botín, un tesoro que guardo ahora en mi cajon secreto.
    Un fuerte abrazo
    Nerim

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  14. Excelente relato, ciertamente muchas veces esa cajita de metal se convierte en nuestro mayor tesoro porque acudimos a ella cuando la vida adulta nos absorbe y lastima.
    saludos

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  15. La infancia es un territorio es exploraciones, de descubrimientos y de memoria. Las fotos estaban en la lata para que las encontrara él. Besos, querido amigo.

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  16. Ufff me hiciste ir por mis cajas y me devolviste recuerdos de la infancia.
    Eres un buen narrador. Ya imagino el rostro de tu enano cuando te escucha.

    Abrazos soleados.

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  17. Ciertamente, los recuerdos de la infancia nos hacen en ocasiones curar dolores de mayores.
    Excelente historia.
    Saludos!!!!!!!!!!!!!!

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  18. Que gran post y de verdad la infancia es una etapa tan importante que marca nuestras vidas x siempre

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  19. Allí está un tesoro que sólo se puede compartir con los que estuvieron mientras vivía esa riqueza, mi infancia son los pocos los amigos y las imagenes que no recuerdo. Por eso los guardo en donde puedo llegar en cualquier instante al abrir una cerradura hecha por mí.




    Pronto vuelvo...

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  20. Gracias. Les responderé y visitaré en unos días, estoy muy ocupado.

    Saludos.

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  21. Comprensible lo de ocupado, espero no esteís viendo televisión...
    jajaja...

    Primero, quién haya dicho por los años '50 que la televisión era el futuro, probablemente lo decía de una manera de buena fe y voluntad.
    El giro que tomó la televisión es inaudíto, nada de cultura, educación, espiritualidad, etc... todo es programas cargados de publicidad y con numeros telefónicos para llamar y adquirir algo...mucho morbo y bueno...

    Fotos: se detiene el tiempo para nosotros en ellas y hace retroceder la mente después de los años.

    Saludos!

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  22. ... què tanto escondemos esas cajas metàlicas llenas de recuerdos dependerà de cuàn buena o mala fue nuestra infancia... ;) jejeje

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  23. Este fin de semana, cuando vaya a ver a los viejitos, sacaremos la caja de fotos, para recordar esa feliz infancia, gracias vos y de acuerdo,la tele debiera ser considerada como droga adictiva.

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  24. que tesoro son esas cajas, interesante relato, yo guardo un baul siempre esta abierto, a lo mejor eso es un error... quien sabe?
    hasta pronto!!

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  25. Buen fin de semana para ti y los tuyos Goathemala.

    Abrazos y :)

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  26. Hola, disculpen el retraso, dejo atrás la locura para retomarla el lunes.

    Waiting, la educación es básica, también en mi nueva entrada lo menciono, gracias.

    Charles, la nostalgia a nuestras edades hay que tenerla un poco contenida ¿verdad?

    Ferípula, gracias, fue fruto de un recuerdo de infancia que varié un poco.

    Azul, defiendo la imaginación porque es mi recurso más inagotable. Divagar, fantasear me define como persona, gracias.

    Cromática, gracias, siempre tan amable. Es un placer contarte como lectora.

    Luz, gracias. Tienes razón pues no será por hermanas te aseguro que tengo bastantes y muy simpáticas todas. Quizá la que se muestra más curiosa es mi madre que apenas lee nada mío y tiene ganas. En mi familia pocos conocen la existencia de este blog.

    Moon, cierto, los recuerdos buenos son tesoros incalculables. ¿Guardas muchos?

    J-oda, mi problema es más esconder al niño que sacarlo a relucir. :-) Gracias.

    Victoria, pienso igual las fotos viejas son tesoros personales. La bulla controlada de los críos no molesta. Es la mejor de las algarabías

    Nerim, en este caso es un tesoro que recibe la luz y que no permanece oculto en acantilados llenos de ropa y alcanfor. Felicidades.

    G. Ruiz, por eso mejor no tenerla demasiado escondida porque será necesario usarla.

    Isabel, gracias, la conclusión que sacó de las fotos fue su botín.

    Clarice, gracias no hay enano propio pero aciertas, cuando nos reunimos los amigos sus hijos me acosan y yo me dejo, claro.

    Scd, sí hay que tenerlos para restañar heridas del presente.

    MC, sí. Es más te diré que una de las pocas cosas de las que estoy, al ciento por ciento, convencido es que mientras más atendamos a la infancia, mejores personas haremos para el futuro. Y a la inversa. Gracias.

    Mar de Isaac, eres de los míos, queda claro.

    Roberto, jaja. No. Ocupado sin tele, trabajando en retornar a sus países de origen la semilla de ciclos más largos. La televisión es un artefacto, se puede hacer otro uso de ella. El actual es deprimente.

    Fiamma, anda que menuda caja abierta que nos estamos haciendo con nuestros blogs ¿verdad?

    Pirata, gracias, me vino tu recuerdo y el de tu padre cuando escribí la historia. Un abrazo a ambos.

    Abandré, no, mejor dejarlo abierto como hacemos con los blogs.

    Luz, gracias de nuevo.

    Saludos.

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  27. Mi madre las escondía, me refiero a las fotos, para que mis hermanas y yo, destrozonas por naturaleza, nos las rompiéramos:):):)
    De esa manera, afortunadamente, han llegado algunas, pocas, hasta nuestros días.

    Dos abrazos

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  28. Y que lo digas, amigo Goathemala... aunque a veces la mìa parece caja de Pandora... jejeje ;) Bromas!!!

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  29. Que bonito cuento! Hay muchas fotos todavia en el armario de mi madre, entre cajitas...que pasados los años me gusta abrir y recordar taaaaaaaaantas cosas. Especialmente ver a muchos que han olvidado lo que fueron.

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